¿Cómo prevenir el castigo físico que daña a los niños y niñas?

Explora nuestra publicación más reciente

Por: Jorge Cuartas y Elizabeth T. Gershoff

El artículo reúne la evidencia más reciente sobre el castigo físico y sus consecuencias: no ofrece beneficios ni mejoras en el comportamiento de niños y niñas. Por el contrario, incrementa la agresividad, afecta la salud mental y puede tener impactos negativos en el desarrollo cerebral.

En este texto, además, se plantean dos prioridades clave para prevenir el castigo físico a nivel global:

  1. Marcos legales protectores: Se requieren leyes firmes que prohíban el castigo físico sin ser punitivas. Su objetivo debe ser enviar un mensaje claro a la sociedad, deslegitimar esta práctica y transformar las normas sociales.

  2. Programas de crianza y apoyo familiar: Es fundamental acompañar a madres, padres y cuidadores en el desarrollo de habilidades para manejar comportamientos difíciles, autorregularse y fortalecer las relaciones familiares, reduciendo así la probabilidad de recurrir al castigo físico.

Finalmente, los autores subrayan la necesidad de seguir investigando cómo escalar estas estrategias de prevención en diferentes contextos y países.

 

 

¿Por qué leer este artículo?

Porque te permitirá comprender, de manera sencilla y basada en evidencia, cuáles son los verdaderos efectos del castigo físico en la infancia y qué medidas son necesarias para prevenirlo.